Subastar la pesca: ¿Quién está detrás?

Subastar la pesca: ¿Quién está detrás?

 

Hugo Roa:

En el mundo pesquero industrial y artesanal todos tienen claro que detrás de la campaña para subastar las cuotas de pesca ha habido una inversión millonaria. Quedó claro desde que en abril de 2010 la empresa noruega Lota Protein presentó un escrito al Tribunal de Defensa de la Libre Competencia por medio de una prestigiosa y cara oficina de abogados de Santiago, para luego lanzar una fuerte ofensiva en la prensa y en el Parlamento a través de una agencia de lobby y contratar economistas y ex ministros como voceros. La guinda de la torta fue que la transnacional “reclutara” a un gremio de pymes con menos de 90 empleados y a un par de dirigentes artesanales de poca representatividad, para así dar la imagen de un bloque con presencia nacional y desprestigiar la Mesa Pesquera patrocinada por el ministro de Economía, Pablo Longueira.

Es de público conocimiento que el Grupo Koppernaes, dueño de Lota Protein, procesa la mitad de la pesca en Noruega, además de poseer grandes inversiones en el negocio del equipamiento portuario y del abastecimiento naviero, con oficinas en Europa y Asia. Sin embargo, siempre ha parecido raro que un conglomerado que ingresó a la pesca chilena en 2002 gracias a la Ley de Límite Máximo de Captura (LMC), comprando una compañía de menos de 100 empleados que posee el 1,8% de la cuota de jurel y una planta de harina, de un día para otro optara por promover agresivamente la subasta de las cuotas de pesca, algo que ni siquiera pasa en Noruega. ¿Por qué en sus casi diez años en el país jamás compró cuotas a otras empresas, como ocurre en todo el mundo, y se mantuvo en silencio hasta que correspondiera renovar la ley de LMC? ¿Por qué está dispuesta a “sacrificar” su cuota pidiendo que se la subasten?

La respuesta tiene tres palabras: China Fishery Group. La mayor productora de harina de pescado del mundo hace rato que tiene un acuerdo con el Grupo Koppernaes para comprar Lota Protein, bajo la condición de que la empresa de capitales noruegos logre que se liciten las cuotas de pesca en Chile. No hay que olvidar que China Fishery Group es una de las compañías con mayor presencia de barcos factoría frente a nuestra Zona Económica Exclusiva (ZEE) y que por años ha pescado jurel sin respetar medidas de conservación. Prueba de esto es que a principio de 2011 la ONG Cedepesca denunció a China Fishery Group como una de las empresas que falseó sus registros de captura ante la Organización Regional de Pesca (ORP) del Pacífico Sur, con el objetivo de acceder a una cuota mayor.

Considerando que las capturas de jurel en el Pacífico Sur han ido cayendo drásticamente hasta llegar a 740 mil toneladas en 2010 y que la reunión de la ORP en Cali acordó una cuota global un 40% inferior para 2011 y un 60% inferior para 2012, es obvio que el negocio no es el mismo para la flota extranjera, en especial para China Fishery Group. No es igual que 11 países pesquen 400 mil toneladas de jurel a que pesquen 170 mil en 2011 y 113 mil en 2012. En un escenario así, a los chinos les conviene promover una licitación de cuotas en Chile; vale decir, crecer a costa del 62% que posee nuestro país. Cosa que no podían hacer desde afuera y menos bajo la firma de una empresa criticada por sobreexplotar el jurel.

Si se licitan las cuotas, es evidente lo que pasará: Lota Protein levantará la mano y no la bajará hasta quedarse con todo lo que se subaste (¿un 20, un 30 o un 50%? Cuanto más, mejor). Una vez que se quede con todo, el barco y la planta de harina de Lota quedará como palo blanco, como mera herramienta de abastecimiento para los barcos factoría de China Fishery Group, que en definitiva serán los que pesquen y procesen todo el jurel para de ahí llevárselo a otros mercados hecho harina. Esa es la verdadera licitación que hoy venden como el remedio para todos los problemas de la pesca, esa es la verdadera licitación por la cual algunos chilenos están dispuestos a todo; la que exterminará la pesca chilena si los tomadores de decisiones no abren los ojos.