Rodrigo Sarquis: “No hay grandes impedimentos para que se opte por dejar los derechos históricos”

Rodrigo Sarquis: “No hay grandes impedimentos para que se opte por dejar los derechos históricos”

 

Carolina Pizarro.

Pese a que la industria siente que sus derechos históricos han sido “vaciados” con la nueva ley sectorial, el presidente de Sonapesca, Rodrigo Sarquis, dijo que no existen grandes impedimentos para que el sector pueda optar por acogerse al nuevo régimen. El sector industrial pesquero tiene seis meses, desde la entrada en vigencia de la ley -lo que se supone sucederá en enero-, para tomar una decisión.

En una entrevista otorgada a La Tercera, Sarquis indicó que la norma tiene una mirada de largo plazo y que existan licencias de pesca renovables es un buen elemento a la hora de que cada empresa tenga que hacer el análisis.

¿Existen incentivos para que el sector deje sus cuotas históricas?

Cada empresa verá si opta a este nuevo sistema. Son 48 empresas industriales a lo largo de todo el país las que participan en las distintas pesquerías. Como asociación gremial, no vemos grandes impedimentos para no suscribir el nuevo régimen propuesto por esta ley (derechos históricos).

¿Cuáles son los incentivos?

La ley tiene muchos aspectos positivos, especialmente el de la sustentabilidad. Eso posibilita una recuperación real de pesquerías a mediano plazo y eso, asociado a un marco jurídico de largo plazo y a unas licencias transables de pesca, despejan el horizonte.

¿La industria siente que perdieron sus derechos históricos?

No se pierden, se reducen. Teníamos una autorización de pesca otorgada por el gobierno que permitía al sector capturar a totalidad y plenitud las cuotas fijadas. Hoy la autoridad dice que para mantenernos estas licencias de pesca, le voy a cobrar un 15%.

Esta modalidad en la cual la autoridad, por mejorar una norma sectorial, le cobra a un sector, no lo habíamos visto nunca. Ha sido novedoso, no lo compartimos.

¿El concepto de expropiación aún se mantiene?

La sensación que tiene la industria es que aquí se están vaciando de contenido las autorizaciones vigentes que tenemos, y eso no lo favorecimos. Lo dijimos en su momento, y el gobierno y el Parlamento opinaron lo contrario. A estas alturas del partido, estas instancias tendrán que hacerse cargo de cuáles serán los resultados de este mecanismo cuando se aplique.

¿Será más difícil operar con esta ley?

La ley da un margen de largo plazo, lo cual es bueno, pero obviamente que significan una serie de regulaciones adicionales que son necesarias. Tendrá que haber un período de acostumbramiento a este nuevo marco que esperamos enfrentar sin mayores dificultades.

¿Con el nuevo modelo, habrá mayores transferencias entre las empresas?

Esa es la idea. El hecho que sean transables, divisibles y sujeto a cualquier negocio jurídico le da más movilidad al sector (…). Obviamente que los resultados que espera el sector y la autoridad es que haya una mayor cantidad de transacciones al bajar los costos asociados a ella.

¿Cómo funcionará en la práctica?

Un ejemplo concreto es lo que sucedió con el terremoto de 2010. Debido a eso, hubo plantas que no pudieron operar un año completo. En el régimen anterior no pescaban sus cuotas y se perdían. En el actual, las cuotas se podrán vender, arrendar o hacer cualquier negocio, de tal manera que generen cualquier actividad que vaya en beneficio de la región y del país. Si una empresa ve que es una alternativa, que tiene un barco en pana o hay otra persona que le puede sacar más valor a la pesca, esto va a generar una mayor movilidad.

Con las mayores exigencias para renovar las licencias, ¿hay riesgo que ellas no se renueven en 20 años más?

No sé. Este es un sistema que será nuevo, donde tendremos que aprender todos. Las condiciones de renovación pesqueras nos parecían razonable, porque están asociadas a un comportamiento que debería tener cualquier empresa, pero las laborales hubiésemos preferido dejarlas afuera. Ahora, el gobierno y el Parlamento estimaron otra cosa. Tendremos que ver sobre la marcha, en cinco años o 10 años y hacer una evaluación de cómo ha funcionado.

¿Es exagerada la expectativa del gobierno de recaudar una base de US$ 50 millones con la nueva forma de tributación?

Si uno piensa que Chile hace 15 años llegó a capturar más de 7 millones de toneladas y hoy captura 250 mil, obviamente hay mucho espacio para poder mejorar. Como la ley se focaliza en la sustentabilidad, creo que seremos capaces de recuperar nuestras pesquerías, y si eso sucede, van a haber buenas noticias para todos. En la medida en que se recuperen las pesquerías, no creemos que esas expectativas estén fuera de la realidad.