Perú detendrá pesca del jurel durante el primer trimestre
por Kharla Caniupán
La medida fue ampliamente discutida debido a que países como Perú -pescó 5,8 veces el volumen establecido- y Rusia no respetaron en 2011 los niveles de extracción acordados.
El presidente de la Comisión de la ORP, William Mansfield, dijo estar decepcionado por no haber podido conseguir un resultado que garantice una extracción total de 390.000 toneladas: “Esto dependerá en gran medida de la cantidad de pescado capturado en las zonas económicas y no en alta mar”.
Perú estuvo al centro del debate. Su embajador, Nicolás Rocangliolo, anunció una cuota de extracción de 120.000 toneladas de jurel dentro de su mar territorial para este año. Esto representa una caída 53,25%, respecto de 2011.
Roncagliolo agrega que para este primer trimestre se estableció una cuota de 40.000 toneladas. Esta ya se alcanzó, por lo que el embajador anunció que “al haber obtenido la cuota prevista para el período suspendimos todo tipo de pesca” en el mar territorial.
El año pasado, en este mismo período, Perú registró desembarques por 81.737 toneladas. En cambio Chile ya había fijado para 2012 una baja de 20% en la cuota de jurel, el menor derecho de captura en la historia, que correspondería a 230 mil toneladas.
El país manifestó su compromiso con las medidas adoptadas y espera que éstas sean las últimas medidas interinas por la entrada en vigor de la Convención. Compatibilizar zonas
La ORP trabaja sobre la base de que el jurel es un único stock y por lo tanto, a pesar de que la organización regional establezca medidas para la pesca en alta mar, éstas deberían replicarse también para las extracciones del recurso dentro de las 200 millas exclusivas de cada país.
El titular de la ORP dijo que Chile, a diferencia del país vecino, restringió su cuota de captura en su zona económica: “Perú ha indicado que reducirá su captura el próximo año. Yo supongo que es algo positivo. Pero estoy decepcionado de no haber logrado compromisos mayores”. Mansfield espera que en los próximos meses estén las ratificaciones necesarias para establecer reglas.
“Vamos a pasar de una situación voluntaria a una de obligaciones legales. Será una organización internacional y los estados que no estén de acuerdo van a tener la obligación de irse de la organización o cooperar siguiendo esas reglas, lo que sería una posición mucho más fuerte”, dijo