Necesidad de velar por la pesca chilena

Necesidad de velar por la pesca chilena

 

Pero la eficacia de una organización regional de esta especie depende de que efectivamente logre definir el nivel máximo de extracción sustentable según el estado de las pesquerías y la información científica disponible, y establecer luego límites a las capturas de los países miembros, de modo que la extracción total no sobrepase dicho máximo. Es la misma lógica del sistema que aplican Chile y otras potencias pesqueras para administrar pesquerías en sus mares territoriales, y es la que cuenta con el mayor respaldo técnico.

Organizaciones similares funcionan hace décadas en otras zonas del mundo, pero esta, que concierne a Chile, está recién tomando forma. La convención se acordó en noviembre de 2009, la han suscrito 13 países y seis de ellos la han ratificado, pero aún no entra en vigencia. Por eso, hasta ahora sólo han regido medidas interinas de carácter voluntario, que Chile ha cumplido pero otros países no, por lo que han resultado inconducentes para recuperar pesquerías colapsadas, como la del jurel.

Esto es motivo de preocupación. El jurel es uno de nuestros principales recursos pesqueros, está absolutamente sobreexplotado, según lo han confirmado especialistas chilenos y de la ORP, y, por su carácter migratorio y transzonal, la única posibilidad de que la biomasa se recupere es restringir drásticamente las capturas por varios años, tanto en el mar territorial chileno como fuera de él.

En nuestro país, las actuales autoridades han tenido el coraje de transparentar el crítico diagnóstico de la pesquería del jurel y de tomar drásticas medidas para proteger este recurso. Entre 2009 y 2012 la cuota global de pesca permitida anualmente se redujo desde 1,3 millones de toneladas, a 284 mil toneladas y luego a 254 mil. Además, el eje central de la nueva Ley de Pesca que se discute en el Congreso es la sustentabilidad. La contracción de la actividad pesquera tiene costos evidentes en el corto plazo, que se compensan con creces por los beneficios de largo plazo de una actividad sustentable. Pero el esfuerzo local será inútil si la misma biomasa de jurel es sobreexplotada fuera del mar chileno. Siendo así, si Chile ha de ratificar el convenio de la ORP, ha de hacerlo en el claro entendido de que esa entidad será capaz de limitar el esfuerzo pesquero de todos sus miembros.