Langostinos esconden un lote de beneficios para el agro

Bio Movens Radic es un producto 100% orgánico. Su uso mejora la absorción de los nutrientes y la eficiencia hídrica del riego.
Sebastián Rubio y Williams Mauad, dueños de la planta camaronera Crustanic, en Coquimbo, llevan dos años desarrollando un subproducto obtenido de los camarones y langostinos. Resulta que los caparazones de estos crustáceos son ricos en quitina, un polímero natural con múltiples beneficios, sobre todo para la industria agrícola (http://bit.ly/3bSFfjZ).

Bio Movens Radic, el compuesto soluble y 100 por ciento orgánico que elaboraron a partir de esta sustancia, estimula los procesos naturales de las plantas, mejorando la absorción de nutrientes, la eficiencia hídrica en riego, la tolerancia al estrés biótico o abiótico y la calidad del cultivo. Su uso está recomendado en cultivos de uva de mesa, vides viníferas, cítricos, carozos, paltos, olivos, frutales en general u hortalizas. “La quitina ataca a las plantas y provoca que estas creen defensas. Es muy parecido a lo que hacen las vacunas en los humanos. Pero la quitina es insoluble, así que hay que pasarla por un proceso de hidrólisis y transformarla en quitosano, el que aplicado a la tierra estimula todos esos procesos en las plantaciones”, explica Rubio.

Bio Movens Radic se utiliza mediante riego tecnificado por goteo. Lo ideal es aplicarlo cuatro veces en primavera y cuatro en el periodo de post cosecha, unos 20 litros por hectárea por cada temporada. Hoy lo utilizan varias empresas agrícolas de Vallenar, Vicuña y Ovalle. “Este año pensamos producir 50.000 litros, y con la nueva planta que estamos desarrollando, esperamos llegar a un millón de litros anuales” añade Rubio.

La idea de Crustanic con este producto es reducir y reutilizar los desechos que genera la planta de camarones. “Apuntamos a generar una economía circular, ya que botar los desechos de estos crustáceos tiene un alto costo para nosotros. Además, la cáscara tiene una gran carga proteica que queremos aprovechar para desarrollar otros productos, como paté y sopa en polvo, entre otros”, detalla el emprendedor. La iniciativa es apoyada por Corfo de la Región de Coquimbo, a través de financiamiento y asesoría tecnológica. “El aporte que hace esta empresa es muy grande. Primero, reduciendo sus desechos y reutilizando sus materias primas, y luego dando un buen ejemplo a otras empresas al demostrar que la economía circular es el mejor camino a seguir”, dice Gregorio Rodríguez, director de Corfo Coquimbo.