Jorge Quiroz: La licitación es tremendamente disruptiva en materia social y económica

Jorge Quiroz: La licitación es tremendamente disruptiva en materia social y económica

 

Quiroz planteó que “la eficiente asignación de los recursos pesqueros quedaría garantizada por un sistema de cuotas individuales transables, que es más o menos cómo opera el sistema actual, sin perjuicio de que es factible y recomendable perfeccionar los mecanismos de transacción haciéndolos menos costosos y extender este sistema a los artesanales de mayor tamaño (muchos de los cuales dejaron de ser artesanales hace mucho tiempo)”. Añadió que lo anterior fue refrendado por el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia cuando analizó el caso por petición de Lota Protein.

El economista también argumentó que el temor en el sector pesquero tradicional no es a que ingresen nuevos actores, ya que este “tiene muchos más actores y menos concentración que la mayoría de los rubros de la economía”. Por el contrario, sostuvo que el verdadero temor es que se ponga en subasta las cuotas de pesca que son el cimiento de toda esta industria, “constituyendo con ello una expropiación”.

“Sería el mismo temor que tendrían los industriales de la Región Metropolitana que tienen permisos para emitir gases, que nadie más tiene porque es una zona saturada, si mañana se les dijese que la mitad de sus permisos de emisión serán subastados al mejor postor. El industrial se preguntaría ¿qué pasará con todas las inversiones que requieren esos permisos para funcionar, operar y generar valor?”, manifestó el asesor de la Sonapesca.

De igual manera, consultado sobre los efectos que podría tener la licitación en el empleo, el economista dijo que -en este escenario- los trabajadores deberían reasignarse de una empresa a otra, lo que involucraría un periodo de desempleo mientras dure el ajuste. “Nadie está en posición de determinar cuán largo podría ser el periodo de ajuste: ¿un año o dos o tres?”, sostuvo.

“Por el desempleo que se podría producir y el efecto en los salarios, el temor de los trabajadores es plenamente justificado. En el largo plazo, el asunto se puede ajustar, pero nadie está en condiciones de decir cuán larga será esa etapa”, reiteró Quiroz.

El consultor fue tajante en mencionar que, en la propuesta que está preparando el Ejecutivo, es posible prever “una disrupción importante en materia social y económica, un periodo de desempleo y ajustes a la baja en los salarios y una discusión interminable, pero de largo alcance, sobre los derechos vulnerados y las compensaciones correspondientes. Todo eso para luego volver, con suerte, al punto inicial, pero habiendo desviado en el trayecto la energía en una discusión que poco o nada tiene que ver con lo realmente importante, que es la conservación del recurso y que es lo que más preocupa al sector pesquero”, concluyó.