Implementación de la nueva Ley de Pesca

Implementación de la nueva Ley de Pesca

 

Uno de los aspectos reformados más importantes fue el proceso de determinación de las cuotas globales de pesca. Si antes era discrecional en parte, opaco y con injerencia de los propios regulados, bajo la nueva normativa cada etapa debe regirse por reglas claras y predefinidas; la transparencia debe ser total y los criterios científicos tienen primacía. El nuevo procedimiento se está aplicando por primera vez este año para fijar las cuotas de 2014. El Instituto de Fomento Pesquero trabaja en sus informes técnicos, que son la base del proceso y que serán revisados luego por evaluadores externos, la subsecretaría y los comités científico-técnicos. Estos últimos serán conformados a fin de mes, cuando se cierre el concurso público convocado por el Ministerio de Economía. Su labor es crucial, porque la ley establece que esos comités delimitarán los rangos dentro de los cuales la autoridad política deberá luego fijar las cuotas, siendo este el único espacio donde podrían caber consideraciones distintas de las puramente científicas.

Hay natural expectación respecto de este proceso. Los cambios legales no bastan y la implementación de las reformas es tanto o más importante para alcanzar los objetivos; en este caso, la explotación sustentable de los recursos marinos. El episodio del bacalao de profundidad evidencia que no será fácil asentar el nuevo esquema: con la promulgación de la ley ad portas , se fijó para 2013 una cuota varias veces por sobre la recomendación científica.

Por eso, urge fortalecer la institucionalidad pública, para que sea capaz de reorientar su quehacer según las nuevas directrices, particularmente aquellas de transparencia y preeminencia de los criterios técnicos, y fortalecerla también en competencias investigativas. A la Subsecretaría de Pesca y Acuicultura, por ejemplo, la ley le encarga elaborar anualmente un informe sobre el estado de situación de las principales pesquerías, indispensable para la correcta administración de las mismas. El informe 2013 es un avance, pero se aprecia aún una brecha importante en cuanto a informes equivalentes de países con más experiencia en esta materia. Queda todavía mucho por avanzar y se requerirá el compromiso de este gobierno y de los siguientes, porque la recuperación de pesquerías es un asunto de mediano y largo plazo.